Vértigo Paroxístico Benigno de la Infancia (VPBI)

🌀Definición

El Vértigo Paroxístico Benigno de la Infancia (VPBI) es un trastorno episódico que se presenta en niños pequeños, generalmente entre 1 y 4 años. Se caracteriza por episodios recurrentes, breves y súbitos de vértigo o desequilibrio que se resuelven espontáneamente.

Se considera un precursor o una variante de la migraña. Los niños afectados suelen tener antecedentes familiares de migraña y pueden desarrollar migrañas típicas (con o sin aura) en la adolescencia o edad adulta.

👶Hallazgos Clínicos

  • Inicio Súbito: El niño, previamente sano, se detiene, se asusta y se aferra a un objeto o a sus padres.
  • Duración Breve: Los episodios duran desde segundos hasta pocos minutos.
  • Síntomas Acompañantes: Pueden presentar palidez, sudoración, nistagmo o vómitos.
  • Conciencia Preservada: El niño permanece consciente durante todo el episodio.
  • Sin Pródromos ni Postdromo: La recuperación es completa e inmediata tras el episodio.
  • Exploración Neurológica Normal: Entre las crisis, el examen físico y neurológico es completamente normal.
  • Frecuencia Variable: Los episodios pueden ocurrir en salvas durante varios días y luego desaparecer por meses.

🧩Diagnóstico Diferencial

Es crucial descartar otras causas de vértigo o ataxia. El VPBI es un diagnóstico de exclusión.

Causas Otológicas

  • Laberintitis / Neuronitis vestibular
  • Vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB)
  • Enfermedad de Menière (rara en niños)

Causas Neurológicas

  • Crisis epilépticas (vértigo como aura)
  • Tumores de fosa posterior
  • Esclerosis múltiple
  • Ataxias episódicas hereditarias

Otras Causas

  • Síncope / Presíncope
  • Hipoglucemia
  • Intoxicaciones
  • Trastornos de conversión / somatización

🚑Manejo en Urgencias

La mayoría de los episodios son tan breves que no requieren intervención. El manejo se centra en la tranquilidad y la seguridad.

  1. Tranquilizar a los padres y al niño: Explicar la naturaleza benigna y autolimitada del cuadro.
  2. Garantizar la seguridad: Colocar al niño en un lugar seguro (suelo, cama) para evitar caídas durante el episodio.
  3. Observación: Monitorizar la duración y las características del episodio. No suele ser necesario tratamiento farmacológico agudo.
  4. Exploración post-crisis: Realizar una exploración neurológica completa una vez que el episodio ha cedido para confirmar la normalidad interictal.
  5. Buscar signos de alarma: Cefalea intensa, alteración de conciencia persistente, focalidad neurológica, fiebre o signos meníngeos. Su presencia obliga a descartar patología grave.

🔬Pruebas Diagnósticas

Si la historia clínica y la exploración son típicas de VPBI, no suelen ser necesarias pruebas complementarias. Se reservan para casos atípicos o si hay dudas diagnósticas.

  • Audiometría y pruebas vestibulares:

    Suelen ser normales. Pueden ayudar a descartar patología del oído interno.

  • Electroencefalograma (EEG):

    Indicado si se sospechan crisis epilépticas. Es normal en el VPBI.

  • Neuroimagen (RM cerebral):

    IMPRESCINDIBLE si hay signos de alarma, exploración neurológica anormal o una presentación atípica para descartar lesiones estructurales, especialmente en fosa posterior.

💊Manejo Farmacológico

El tratamiento profiláctico rara vez es necesario debido a la naturaleza benigna y la tendencia a la resolución espontánea. Se considera solo si los episodios son muy frecuentes e incapacitantes.

Fármaco Dosis Pediátrica Presentaciones Comunes
Ciproheptadina 0.2-0.4 mg/kg/día, dividido en 2-3 dosis Solución oral, comprimidos
Propranolol 0.5-2 mg/kg/día, dividido en 2-3 dosis Solución oral, comprimidos
Topiramato Inicio 1 mg/kg/día, titular lentamente hasta 3-5 mg/kg/día Cápsulas, comprimidos

*Nota: El uso de estos fármacos para VPBI es off-label. La decisión debe ser individualizada y supervisada por un neuropediatra.

🧘Manejo No Farmacológico

La base del manejo es la educación y la tranquilidad familiar.

  • Educación Familiar

    Explicar la relación con la migraña y su excelente pronóstico a largo plazo.

  • Identificar Desencadenantes

    Aunque menos comunes que en la migraña, se pueden buscar posibles triggers como fatiga, estrés o cambios bruscos de posición.

  • Higiene del Sueño

    Asegurar un descanso adecuado y regular puede disminuir la frecuencia de los episodios.

  • Diario de Síntomas

    Animar a los padres a llevar un registro de los episodios puede ayudar a objetivar la frecuencia y a identificar patrones.